Mientras nos sentamos bajo la sombra del mundo,
a tirar piedras a nuestros fantasmas de siempre
a escuchar la desolación de las palabras,
nos dirigimos, siempre, hacia algún lugar.
Mientras entra en actividad el volcán de la noche
alguien prende fuego a sus certezas
y comprueba
que resistir es un pelaje invisible.
Mientras
la vida imita el sonido de otra vida
como un animal que se desangra
alguien estira las piernas bajo la desdicha.
Encuentra algo que no era suyo.
Recupera la fe que nunca tuvo.
Mientras China se arma nuclearmente
vos te desarmas de una guerra imposible.
Laura, me fascina, ya lo sabés, no te estoy diciendo nada que no te haya dicho!
ResponderEliminarun abrazo
me encanta. me encanta. me encanta. y perdón por carecer de la virtud de los buenos comentaristas. pero vos sabés lo que pienso de tu escritura.
ResponderEliminarun abrazo
Lo irrestible de ver luz y entrar.
ResponderEliminarAdmiro tu manera de decir todo.
De traducir la luz en tantos colores, en tantas voces.
Gracias por traernos otros mundos , a nosotros...simples mortales, chinos de almas nucleares.
me gustó, tiene mucha fuerza y un "lirismo" bastante oscuro
ResponderEliminarNoelia: Gracias por lo dicho y por volver.
ResponderEliminarEmma: virtud en los comentarios me suena a una especie de idealización virtual. Creo que uno espera imprimir huellas, que se imprima la huella del otro. Eso de vos que en mi ya está dado hace tiempo y que vos sabés expresar a la perfección.
Vero: Esto es más tuyo y de la China que mío.
AC: Gracias por entrar. Me da satisfacción y alegría. Un abrazo